29 diciembre 2005

El inevitable mazoquismo

A veces me sobra el tiempo, y cual filósofo antiguo me pongo a pensar en cuestiones que carecen de importancia alguna para la vida.
Una de las muchas es porque tantas, y tantas mujeres (supongo que los hombres también, pero no lo admiten), cuando tienen algo, por mínimo que sea, de que preocuparse, se martirizan escuchando música que las deprime peor. No es una crítica, yo misma poseo dos CD's con una selección de las canciones que me ponen peor cuidadosamente elegidas por mi para castigarme de vez en cuando, entre las que figuran, por ejemplo "I still got the blues" de Gary Moore, seguida por "En la otra orilla" , de Rosana. Como si todo esto fuese poco, los mencionados dispositivos musicales recibieron a puño (mío) el nombre de "Para llorar, I y II".
hasta ahora, no he arribado a conclusiones demasiado reveladoras, pero creo en la posibilidad de que uno puede empatizar con el que canta, y compartir ese dolor tan agudo del amor que no está, que se fue, o no funcionó, etc.

1 comentario:

DINOBAT dijo...

Hola, la perfección aburre, sigue buscando, quizás encuentres... me gustó tu blog, nos leemos, besos,


JD

msn n76pf@hotmail.com