En una de esas, si dejo de aferrarme a aquello que no solamente no es mío, sino que ya he comprobado empíricamente que no funciona y no me hace bien, pueda abrir los ojos más y mejor para ver lo nuevo y lo posible.
Lógicamente, seguir repitiendo patrones, una y otra vez como en un capítulo de la dimensión desconocida no me va a llevar a ningún lado nuevo, y como si eso fuera poco, si mal no recuerdo, es precisamente la definición de la locura, "seguir haciendo lo mismo esperando resultados distintos"
Está bien, el mundo puede cambiar, no es un imposible absoluto, pero ¿realmente quiero un papel tan pasivo en la historia de mi vida?. Me imagino, cuando los amigo me pregunten: Y, ¿que hiciste? Sería bastante triste decirles: Nada, estoy observando con atención, esperando que el mundo cambien solito mientras yo me pudro.
No, no puedo seguir repitiendo, no creo que sea casualidad, que además de la misma personalidad, tengan todos el mismo nombre. Ya sé que es un nombre común, pero aún así, ¡Vamos!
23 junio 2008
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